En el último libro, la prolífica autora de autodesarrollo Tracy (La ciencia de la influencia, 2019, etc.) ofrece a los posibles empresarios métodos para alcanzar sus metas financieras. Su tono es inspirador (“En el espíritu empresarial de hoy, no se puede empezar de nada”) y su prosa es muy legible, pero lo que es más importante, su consejo es sensato, que es donde el libro difiere de muchas otras guías sobre el espíritu empresarial.
Sin embargo, sus consejos no se enmarcan como opcionales, porque Tracy aprendió sus lecciones de la manera más difícil; carecía de un diploma de escuela secundaria y trabajó como jornalero antes de convertirse en un empresario exitoso. El quinto capítulo de su libro, en particular, es un tesoro de amor duro, que enfatiza la autosuficiencia sobre el derecho («Nadie te debe nada … No puedes imaginar una persona exitosa que culpe de todos sus problemas a otra persona»). La «fórmula del 1,000 por ciento» de Tracy también promete magia práctica: afirma que «si aumenta sus ingresos en un 25 por ciento por año, entonces, al capitalizar, aumentará sus ingresos diez veces en diez años», y uno puede hacer esto, él dice, aumentando constantemente la productividad.
Muchos de sus clientes lo hicieron en seis o siete años, escribe; el autor lo hizo en cinco. Tracy efectivamente divide su proceso en pasos manejables, comenzando por aumentar la productividad de uno en un 2% por mes comenzando el día antes, trabajando más duro, quedando más tarde, planificando todos los días con anticipación y sin perder tiempo.
Los capítulos incorporan preguntas que ayudarán a los lectores a formular planes de acción que cubran todas las bases, incluida la creación de un plan de negocios «realista», el desarrollo de una estrategia de marketing y la toma de decisiones de contratación y despido. Con respecto a este último, por ejemplo, Tracy señala que muchas organizaciones tienden a contratar personas lentamente y despedirlas rápidamente (“Hay una regla básica que dice que el mejor momento para despedir a una persona es la primera vez que se le pasa por la cabeza”).
Los aspirantes a empresarios se beneficiarán de las sencillas estrategias de Tracy.