«La habitación prohibida» de Sasha Grey, el segundo libro de su serie, mantiene el entretenimiento del primero y presenta una trama sólida, accesible incluso para quienes no han leído la primera parte. En este libro, la protagonista, Catherine, quien empezó como estudiante de cine y ahora se desempeña como periodista, sigue en contacto con Jack, el incomprensible asistente político. La trama se centra en la desaparición y presunto suicidio de Inana Luna, una modelo y actriz renombrada. Catherine consigue, de manera bastante inverosímil, el trabajo que Inana tenía en un hotel de lujo, permitiéndole investigar un exclusivo club de relaciones.
El libro explora con mayor profundidad ciertos aspectos de la sexualidad de Catherine, ya presentes de forma breve en el primer libro. A pesar de cierta previsibilidad, «La habitación prohibida» es un viaje a través de una cultura a menudo malinterpretada, enriquecido con referencias mitológicas más abundantes que en el libro anterior. La narrativa de Grey muestra una evolución, anticipando un mayor desarrollo del personaje de Catherine. Lo destacado de esta novela es que, pese a su género erótico, prioriza el misterio sobre las escenas de sexo. Aunque el final previsible no desagrada, deja abierta la trama principal, especialmente en lo que respecta a Inana, apuntando hacia una tercera entrega que probablemente sea parte de una trilogía. El libro, oscuro y gráfico como el primero, está dirigido a un público adulto.
Una advertencia para los lectores: el libro termina en un cliffhanger que deja varias cuestiones sin resolver, especialmente en torno a Inana, preparando el escenario para la continuación de la serie. Esto puede resultar ligeramente frustrante para quienes desean conocer el desenlace de la trama de Inana, y parece ser un anzuelo para la siguiente entrega
