El arte de la Ficción de James Salter son tres conferencias sobre la ficción, que son una mezcla de puntos de vista sobre escritura y sobre la importancia de la ficción, por un lado, y por otro lado los chismes literarios. Uno para leer con un lápiz e ir anotando ideas. La frase más memorable para mí :
«El libro se convirtió en parte de mi historia del mundo».
Salter habla de L’Amant por Marguerite Duras. Pero él podría hablar sobre cualquier obra de ficción interesante. Creo que es una idea maravillosa: que las buenas historias pueden convertirse en parte de nuestra historia, tan importantes como lo que realmente sucedió.
Salter nos habla con una intimidad fácil, compartiendo su incesante encanto con los libros que conformaron su vida de lectura, incluyendo obras de Balzac, Flaubert, Babel (cuya prosa es «como un puñado de radio»), Dreiser, Céline, Faulkner . Estas charlas ofrecen una oportunidad inestimable para ver la forma en que un gran escritor lee. También ofrecen una mirada franca sobre la vida de la escritura: las cartas de rechazo, no una sino dos críticas negativas en el New York Times para el mismo libro, escribir por la mañana o por la noche y preocuparse por el dinero durante las largas tardes.
Salter plantea la pregunta: ¿Por qué uno escribe? Por la riqueza? ¿Por admiración o sentido de «importancia»? Enfrentando una hoja en blanco que siempre ofrece demasiadas opciones, practicando una vocación que a menudo exige escribir en lugar de vivir, la respuesta para Salter fue crear un estilo que capturara la experiencia, en un mundo donde todo lo que no se escribe se desvanece.
Booktrailer del libro El arte de la Ficción de James Salter
Acerca del autor James Salter
James Salter (1925 – 2015) fue novelista, cuentista y guionista. Salter creció en la ciudad de Nueva York y fue un oficial de carrera y piloto de la Fuerza Aérea hasta la treintena, cuando el éxito de su primera novela (The Hunters, 1957) dio lugar a una carrera de escritor a tiempo completo. La prosa lírica potente de Salter le valió la aclamación de críticos, lectores y otros novelistas. Su novela A Sport and a Pastime (1967) fue aclamada por el New York Times como «casi perfecta como cualquier ficción estadounidense
