“Que hacer cuando en la pantalla aparece The end” es un libro de Paula Bonet que nos llevar a sumergirnos en historias donde inevitablemente llega el fin. Y antes de continuar con la descripción, tenemos que destacar sus maravillosas ilustraciones que ponen a volar nuestra imaginación y nos meten más en la historia.
El final llega sin previo aviso. El alma se parte en dos. Se alarga por algunos años. El orgullo y los recuerdos se confunden.
En eso nos montamos en trenes, nos hospedamos en habitaciones de hoteles en pueblos lejanos, continuamente estamos enganchados a un pantalla en la espera que alguien nos de la siguiendo indicación para movernos, eso que nos guiara a ir de forma conciente a un final que hace tiempo llevamos buscando. Pero ese final se hace tardar y una mañana parece que llega de repente. Al desperar sientes el vacío y en la pantalla aparece: The End. Es momento de empezar otra historia. Una en la que no haya necesidad de fingir que no nos conocemos. Esta historia.
Booktrailer del libro Que hacer cuando en la pantalla aparece The End de Paula Bonet
Acerca de la Autora Paula Bonet
Nació en Vila-real. Desde que era una niña amaba todo lo relacionado con los dibujos y la forma de expresarse artísticamente. A la edad de 14 años se incorporó a una academia de dibujo en la ciudad donde nació, gracias a esto empezó a coquetear con lo que serían, años más tarde su profesión. Después de terminar la escuela secundaria, decidió estudiar Bellas Artes en contra de muchos de sus familiares más cercanos y amigos quienes le aconsejaron que debería estudiar otras carreras que tienen un rendimiento más profesional. Cuando Paula tenía 17 años fue admitida en la Universidad Politécnica de Valencia para estudiar Bellas Artes. Una vez que ya había completado estos estudios, decidió pasar tiempo en el extranjero para completar sus estudios universitarios. Viajó a Santiago de Chile y durante cuatro meses estudió en la PUC. Después de eso, fue a Nueva York gracias a una beca y estudió en la Universidad de Nueva York seis meses. Casi cada verano desde que tenía 25 años, viajó a Urbino (Italia) para tomar algunos cursos cortos de prestigio.
Estaba muy clara de que estudiar en el extranjero le ayudaría a abrir su mente, buscando nuevos horizontes y descubriendo nuevas influencias. Durante cuatro años encontro r difícil combinar su trabajo docente en una escuela de Valencia (España) y su trabajo de ilustrador. Así que decidió concentrarse totalmente en la ilustración, después de cinco meses se trasladó a Barcelona, donde pudo encontrar mayores movimientos artísticos. Hoy en día, ella recibe nuevas ofertas de trabajo casi todos los días. Ella ganó muchos fans debido a la gente hablando de ella, la mayoría de su público eran mujeres. Después de eso, sus habilidades de ilustración aparecieron en autobuses, murales y anuncios. Ha expuesto en algunas ciudades europeas, como Porto, Florencia o París, sin olvidar Barcelona y Valencia. Ella es casi un fenómeno de fans, tiene 200.000 seguidores en las redes sociales.
